La Faba de Lourenzá

Introducción

Debido a las características del suelo y a las técnicas tradicionales empleadas en su cultivo, las leguminosas producidas en la Mariña lucense presentan una calidad culinaria excepcional.

Estas condiciones edafológicas de la zona son especialmente favorables para el cultivo de la Faba, obteniéndose un grano brillante, de piel fina y pulpa tierna, con una agradable textura y un característico sabor.

En lo que respecta al clima, las abundantes lluvias en el área productora de la Faba de Lourenzá -1.200-1.400 mm/año- y las temperaturas suaves -media anual de 12 a 14°- favorecen el óptimo desarrollo vegetativo de los cultivos y, por consiguiente, se obtienen unas cosechas finales de calidad contrastada.

En las zonas agrícolas productoras predominan los suelos francos y franco-fangosos, con valores de pH comprendidos entre 7 y 5, ideales para el cultivo de la alubia.

Historia e influencia asturiana

El Ayuntamiento de Lourenzá reseñó a lo largo de los últimos siglos los intercambios de mercaderías que en él se producían. La vida económica de la zona estuvo así determinada por la celebración periódica de mercados de ganado y productos agrícolas. En este sentido existen documentos del siglo XVIII que ya incluyen noticias sobre la actividad comercial del municipio.

El mercado de alubias de Lourenzá está documentado desde el siglo XVIII, tal y como se apunta en el Archivo de Geografía General del Reino de Galicia:

  • La producción agrícola es de lo más vario y selecto, como corresponde a un terreno tan fértil y ameno. Desde las plantas tropicales hasta las propias de climas templados, y aun fríos, todo se cultiva aquí, pudiendo afirmarse sin exageración que es el valle de Lourenzá el jardín de la provincia (...); que en 1787 existían (...) fanegas de alubias (...).

Deja también constancia esta publicación de que ya a la sazón se celebraban los mercados periódicos que hoy conocemos:

  • En la capital se celebran mercados todos los domingos, y ferias el 9 y 28 de cada mes (...).

A lo largo del siglo XX diversos documentos hacen referencia a la celebración de las ferias y mercados de productos agrícolas en Lourenzá. En todos ellos se especifica ya que la Faba era uno de los principales productos a comercializar.

Entre los años 70 y 80 se le da empuje a la producción de la Faba de Lourenzá y del lino para mitigar los problemas que la cuota láctea estaba causando entre los propietarios de explotaciones ganaderas. Este tipo de cultivos se eligieron teniendo en cuenta su estacionalidad -duran 6 meses- y al hecho de que podían ser atendidos exclusivamente por la mujer.

En la última década del XX cobra especial relevancia el mercado de alubias al por mayor entre los meses de octubre y enero. En el período que va de 1990 al año 2000 la venta de alubias experimentó el mayor aumento de su historia, encontrándose la Fiesta de la Faba -creada en el año 1990- entre las principales causas de este crecimiento.

Ya en los primeros años del siglo XXI el mercado al por mayor de alubias se consolidó como un referente al conseguir un volumen aproximado de 600.000 kg. de transacción de producto.

De cara a profesionalizar este sector en auge, el Ayuntamiento de Lourenzá promovió la construcción de la Lonxa de Horta, Flor e Faba. Este recinto centralizará en un futuro próximo la comercialización de la Faba de Lourenzá bajo un precio y condiciones controladas.

Producción, distribución y procesado

Atendiendo a las cifras compiladas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Galicia se situaba en 2001 entre las principales comunidades productoras de alubias de la Península.

Así, el volumen de producción de Galicia -2.774 toneladas de grano- sólo fue superado por la comunidad de Castilla y León, en la que se obtuvieron 7.260 toneladas.

El Principado de Asturias, uno de los más relevantes distribuidores y consumidores de alubias en España, conseguía sólo el tercer puesto, con 989 toneladas anuales de producción. Este hecho parece indicar que parte de la leguminosa comercializada en la comunidad asturiana procede de campos de cultivo gallegos.

En los primeros años de este siglo el mercado al por mayor de Faba de Lourenzá fue consolidándose como un referente consiguiendo un volumen anual de transacción de 600 toneladas.

Comercialización

alubia lourenzaActualmente el Ayuntamiento de Lourenzá está haciendo una importante apuesta de futuro en lo que respecta a la promoción comercial de la faba. Así, está a punto de ponerse en marcha la Lonxa de Horta, Flor e Faba, donde próximamente se centralizará la comercialización de esta leguminosa.

La medida favorecerá el control del precio del producto, así como la calidad de sus condiciones, de manera que pueda establecer un protocolo de compra-venta óptimo tanto para productor como para los consumidores.

Procesado

La Faba de Lourenzá llega hasta los consumidores después de un riguroso proceso de selección, almacenamiento y conservación. Tras la cosecha la leguminosa es sometida a una exhaustiva limpieza y criba, eliminando cualquier posible cuerpo extraño mezclado con el grano.

alubia lourenzaEn un segundo paso, se desechan los granos defectuosos y se clasifican las alubias atendiendo a su calibre. Para evitar la aparición de gorgojo y el deterioro de la leguminosa, la alubia es introducida en una cámara frigorífica durante al menos 48 horas a una temperatura inferior a los -20°C. Este proceso, que garantiza las óptimas condiciones físicas y organolépticas de la faba, implica además la ausencia de tratamientos químicos en la conservación del producto.

Una vez superado este proceso, las fabas son almacenadas a temperatura ambiente en locales frescos y secos, donde permanecen hasta el momento del envasado.

La Alubia de Lourenzá se comercializa en envases confeccionados con materiales que permitan la correcta ventilación, conservación y transporte del producto. Por norma general, se presentan en dos tamaños con capacidad para 0,5 y 1 kg de legumbres.

Técnicas de cultivo

alubia lourenzaCultivo asociado

El sistema de cultivo asociado al maíz proporciona menores rendimientos finales, aunque esta doble producción supone una alternativa interesante desde el punto de vista de un aprovechamiento sostenible de los recursos naturales. Esta asociación encaja perfectamente en la estructura agrícola gallega, caracterizada por la reducida superficie de las explotaciones.

De esta manera, el cultivo asociado alubia-maíz es una práctica habitual empleada por los agricultores de la zona, como fórmula tradicional que recurre a materiales autóctonos. En esta modalidad el maíz actúa como soporte cuando la alubia sembrada es de hábito trepador.

Monocultivo

alubia lourenzaLa evolución y la modernización de la agricultura en las zonas productoras supuso la puesta en marcha de explotaciones más profesionalizadas, el que representó un cambio radical en el esquema tradicional del cultivo de la alubia.

El asociaciomismo del maíz y la leguminosa se sustituyó en muchos casos por extensiones de monocultivo, donde la faba crece con la ayuda de tutores.

Preparación del terreno

Este proceso consiste fundamentalmente en la descompactación de la tierra para el posterior goteo de las alubias. Además hay que añadirle al suelo fertilizantes que favorezcan la correcta germinación.

Sembrado

Entre los meses de mayo y junio es tiempo de sembrar las fabas. Estas se entierran a una profundidad que va entre 2 y 5 centímetros. La distancia de separación entre plantas viene determinada por el tipo de cultivo en cuestión: asociado o entutorado.

Tratamientos

El cultivo de la alubia está expuesto al ataque de diversas plagas y enfermedades. Para evitar daños en la cosecha deben tomarse diversas medidas de precaución, que se complementan con el empleo de tratamientos químicos.

Riego

Las alubias son muy sensibles a la falta o exceso de agua, especialmente durante la etapa de floración. Los suelos deben presentar un nivel de humedad constante para el correcto desarrollo de las plantas.

Recolección

Entre los meses de agosto y noviembre se procede a la recolección, que puede hacerse bagullo a bagullo o arrancando completamente la planta para su posterior secado.

Denominación de Origen

En el año 2000 comenzó a tomar cuerpo una demanda que el Ayuntamiento de Lourenzá venía madurando desde tiempo atrás. La Xunta de Galicia se comprometía a apoyar la aprobación de una Denominación de Origen Protegido para las fabas cultivadas en la Marina lucense.

alubia lourenza del

En concreto, este distintivo abarca a la leguminosa producida en los ayuntamientos de Alfoz, Barreiros, Burela, Foz, Lourenzá, Mondoñedo, A Pontenova, Ribadeo, Trabada, O Valadouro, O Vicedo, Viveiro y Xove.

Situación actual

alubia lourenza delEn la actualidad, la Denominación de Origen Protegido de la Alubia de Lourenzá aguarda la aprobación del Ministerio de Agricultura español y del departamento correspondiente de la Unión Europea en Bruselas. Estos trámites podrían concluir en un breve período de tiempo.

Diversos estudios, encargados por el Ayuntamiento de Lourenzá desde el año 2001, definen las variedades cultivadas en la zona, así como las condiciones climáticas y edafológicas que le confiere al producto unas características especiales.

Mientras tanto, la producción de la leguminosa se adecuó a las necesidades actuales, incorporando los criterios de calidad precisos para optar al distintivo. Así, las fabas cultivadas en la Mariña lucense están ya adaptadas a unas condiciones de sembrado, recolección, procesado, conservación y envasado específicas que garantizan unas óptimas características finales.

Tipos de alubias

El proceso de especialización acometido en los últimos años llevó a que la producción de fabas en el Valle de Lourenzá gire hoy en día alrededor de dos variedades principales: la Faba Galaica y la Faba do Marisco. Esta evolución viene además marcada por las exigencias del mercado que demanda productos de una mayor calidad.

Estas dos variedades locales, pertenecientes a la especie Phaseolus vulgaris E., se comercializan como alubias secas separadas ya de su bagullo, enteras, limpias y destinadas al consumo humano. Sus principales característicos son:

Variedad Faba Galaica

Planta

  • Porte trepador, indeterminado, con entrenudos largos.
  • Follaje de elevada densidad.
  • Hojas de color verde, de gran tamaño y bruscamente acuminadas.

alubia lourenza galaicoBagullo

  • Color verde en su estado in-maduro, y color crema amarillento con manchas rojas o violáceas en su madurez.
  • Superficie lisa.
  • Perfil arcuado.
  • Ápice afilado.
  • Diente apical arqueado, marginal y largo.
  • Sección elíptica.

Flor

  • Mayoritariamente blanca, observando en la madurez un color amarillento, pudiendo aparecer ligeras vetas de color violáceo.

alubia lourenza galaicoGrano

  • Sin dibujo, de color blanco uniforme.
  • Tamaño muy grande (unos 100 - 110 granos por 100 gramos de semilla)
  • Medidas: longitud 19 - 26 mm; ancho 9 - 11 mm; grosor 7 - 8 mm.
  • Forma de riñón, largo, semilleno.
  • Humedad entre el 14 y el 17%.
  • Proporción de piel entre el 6 y 7%, aproximadamente.
  • Absorción de agua superior al 100%.

Ciclo vegetativo

  • Muy tardío, mayor a los 136 días.

Características organolépticas

  • En su cocción los granos permanecerán enteros sin desprenderse de su piel.
  • En su degustación destaca la pastosidad de la pulpa, exenta de grumos. No existe diferenciación entre la piel y la pulpa.

Variedad Faba do Marisco

alubia lourenza mariscoPlanta

  • Porte enano, con hábito de crecimiento determinado y entrenudos cortos.
  • Hojas de color verde, tamaño mediano y forma acuminada.

Bagullo

  • Color verde, tanto en su estado in-maduro como en la madurez.
  • Superficie lisa.
  • Perfil arqueado.
  • Ápice abrupto.
  • Diente apical arcuado, marginal y medio.
  • Presentan hebra y pergamino.
  • Sección elíptica.

alubia lourenza mariscoGrano

  • Sin dibujo, de color verde uniforme.
  • Tamaño de pequeño a muy pequeño (unos 350 - 450 granos por 100 gramos de semilla).
  • Medidas: longitud 11 - 16 mm; ancho 06 - 08 mm; grosor; 03 - 05 mm.
  • Forma de riñón, medio, aplanado.
  • Humedad entre el 13 y el 15 %.
  • Proporción de piel entre el 8 y el 10%, aproximadamente.
  • Absorción de agua superior al 100%.

Ciclo vegetativo

  • Va desde muy tempranera a semitempranera, dependiendo de la época de sembrado.

Características organolépticas

  • En su cocción los granos permanecerán enteros sin desprenderse de la piel.
  • En su degustación destaca la pastosidade de la pulpa, exenta de grumos. No existe diferenciación entre la piel y la pulpa.